Con la cabeza alta.Así es como debemos ir tras,no sólo tutear si no,tener contra las cuerdas al mejor equipo de la categoría.
Empezamos el encuentro jugando un gran baloncesto,con un acierto nada usual en estas ligas(9-11 en triples en la primera parte),lo que nos llevó a conseguir una renta de 17 puntos poco antes del descanso,y aunque los molineros apretaron en defensa y la redujeron hasta los 4,volvimos a distanciarnos hasta los 9 del descanso(37-46).
En la segunda parte Molina salió en tromba,como era de esperar,e intentabamos aguantar como gato panza arriba,pero el cansancio y los errores forzados por el rival ponía tablas en el electrónico.
Así se afrontaba el último cuarto,con los locales a un ritmo endiablado y nosotros intentando aguantar el tirón,pero la diferencia en el tono físico era demasiado grande como para mantener el marcador igualado.
Al final 9 puntos de diferencia hicieron justicia a los meritos de uno y otro equipo,por un lado los mejores del grupo y por el otro un equipo que de haber tenido a este entrenador desde principio de temporada habría entrado en play-off seguro.